Voto baboso católico

Como cristianos, nos reconocemos como hijos de Dios y nos sabemos libres. Por eso nos repugna cualquier reducción de nuestras libertades:

1. Que nos limiten el acceso a una lengua que hablaban nuestros antepasados y que queremos seguir haciendo nosotros: honrarás a tu padre y a tu madre.
2. Que nos impongan una lengua local en detrimento de la que hablan cientos de millones de personas, porque eso nos impide llevar la palabra de Dios a más personas. Católico significa universal, no local, pueblerino y unicejo.
   
3. Que, como buenos conservadores  girondinos (PP), mantengan las leyes perversas que cocinan los jacobinos (progresistas) en las logias y que luego se convierten en leyes: ideología de género, hembrismo, antivida (divorcio, aborto, cacotanasia...)
4. Que me coarten la libertad de poder elegir para mis hijos el colegio que yo quiera, reduciendo la oferta, reduciendo la asignación para mantener colegios que el estado no controla, que consideren a los colegios concertados (especialmente los católicos y especialmente los colegios de educación segregada) como colegios de segunda...
5. Que inculquen a mis hijos ideas erróneas y que tenga que estar siempre a la defensiva con el centro porque haya perdido mi confianza en su dirección.
6. Que utilicen mis impuestos para pagar sus chiringuitos ideológicos contrarios a mis creencias y que encima tenga que soportar que me estigmaticen.
   
7. Que tengan secuestrados a los medios de comunicación con mis impuestos para transmitir noticias y programas con contenidos nauseabundos contrarios a mi forma de pensar y mis convecciones o que sesguen de tal forma las noticias en las que nunca se mencione a determinado partido y cuando se haga, siempre sea con tintes peyorativos.

Podéis seguir alargando la lista lo que queráis, pero el problema de España no es la democracia, sino el partido único que se denomina PPSOE+, como lo fue el PRI en México. Una moneda adulterada con la que comprar democracia.
Y en lo que nos toca a los católicos, se me cae la cara de vergüenza el tratamiento baboso que se le hace al PP desde TRECE TV o desde la COPE a través de sus más destacadas figuras mediáticas. Si se creen que con la complacencia medrosa van a conseguir algo, que miren en la CEE qué se ha conseguido con esa actitud en los últimos 40 años y si todavía guardan los obispos alguna esperanza ingenua de conseguirlo en los próximos.
Hasta que no se denuncie con valentía a los girondinos del PP, conservadores zurdos que se venden como de derechas; muchos católicos engañados seguirán manteniendo el status quo hasta que seamos prescindibles y entonces, lo que quede de la sal sosa, será tirada a la calle para que sea pisoteada por los mismos a los que ahora apoyan.
Como le dijo Churchill desde la oposición al entonces primer ministro británico, Neville Chamberlain, cuando vino ufano exhibiendo la paz de los Sudetes con Hitler: "Entre el deshonor y la guerra, habéis elegido el deshonor... y tendréis la guerra"