Monstruos empoderándose

 

Hoy día 25 de marzo, a nueve meses vista del día del nacimiento de Jesús de Nazaret; la muy ilustre Generalitat Valenciana, a través de uno de sus tentáculos, con los que va permeando su programa de ingeniería social, tiene a bien estrenar la obra "Manifest Antirromàntic".

El tentáculo, en esta ocasión, se denomina Institut Valencià de Cultura, del que depende el Teatro Principal de Valencia. Es el teatro más grande de la capital del Antiguo Reino.

No han parado en gastos. Por todo lo alto. Sin contemplaciones. Es que, cuando una obra recoge toda la esencia fundamental del régimen, hay que lanzarla con todo el apoyo del régimen, para que sirva de aviso a todos los navegantes, tanto a los que quieran producir cultura como a los que quieran consumirla y creerse que son modernos por ello.

Es la contraprogramación a la que nos tiene acostumbrados desde el vasallaje al NOM de nuestras instituciones. Cipayos complacientes y complacidos.

La portada ya lo dice todo. Mujer que no se representa como una caricatura grosera y grotesca de si misma, sin pudor. Enseñándose toda sin escrúpulos, con una motosierra en la mano; empuñada a modo de arma; eso si, rosa y rodeada de bebés descuartizados. Imagino que por ella misma con su motosierra empoderadora.

Todo un sarcasmo que refleja de forma precisa la realidad actual en la que nos hemos devenido y en la qu eya no nos reconocemos. Como diría nuestro afamado Goya: "Los sueños de la razón, producen monstruos"