Re-Evolución Sexual

De acuerdo con el informe de la OMS (Organización Mundial de la Salud) ID: BLT.18.218651, donde se analiza la prevalencia e incidencia a nivel mundial de las ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual) en el año 2016 y que fue recientemente publicada en línea el 6 de Junio de 2019, se registraron 376 millones de nuevos casos de clamidia, gonorrea, tricomoniasis y sífilis en personas de entre 15 y 49 años de edad, el año más reciente para el cual se dispone de datos. La tasa de infección se ha mantenido sin cambios respecto a los datos recopilados cinco años antes.
Más de un millón d enuevos casos de enfermedades de transmisión sexual. Si no se trata, se puede causar infertilidad, muerte fetal, embarazo ectópico, enfermedades cardíacas y afecciones neurológicas. Las personas infectadas también corren el riesgo de desarrollar VIH, que causa el SIDA.
Si hubiera una guerra en la que las cifras de víctimas alcanzaran a un millón de personas muertas o heridas, saldría todos los días como noticia destacada en todos los noticiarios. Pero es que además,  la mayoría de los afectados son jóvenes.
Esta guerra es mundial y está ocurriendo desde hace muchos años. Es la consecuencia de la revolución sexual de mayo del 68. La cifra total de víctimas de esta guerra no es un millón de muertos o heridos. Se trata de más de un millón de casos nuevos por día, todos los días, en todo el mundo. 
Y esta guerra no la estamos ganando. No se estáa reduciendo la cantidad de infecciones en los últimos cinco años. "Estamos viendo una falta preocupante de progreso para detener la propagación de infecciones de transmisión sexual en todo el mundo", dijo el Dr. Peter Salama, director ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud. 

Como en todas las guerras, las personas inocentes también se ven afectadas. Muchas de las personas con enfermedades no desarrollan síntomas de enfermedad, pero infectan a otras personas a través del contacto diario o incluso casual. 
Los casos más trágicos son los fetos inocentes que pueden contraer defectos de nacimiento, neumonía y ceguera de sus madres infectadas. La sífilis, transmitida durante el embarazo y el parto, causó 200,000 muertes fetales y muertes de recién nacidos en 2016.

Si bien la mayoría de estas enfermedades son curables, los esfuerzos para tratarlas se ven obstaculizados por una escasez mundial del medicamento llamado penicilina benzatínica. Además, ya hay cepas de gonorrea que han desarrollado resistencia a los antibióticos.
Cuando pones antibióticos en el cuerpo, no sólo es la gonorrea la que puede adquiriri resistencia, sino cualquier otro parásito que entre en contacto con el mismo, por lo que el resultado es que con el tiempo, otras bacterias no relacionadas con la ETS, también están aumentando su resistencia a los fármacos. Esto nos afecta no sólo a los que promíscuos sino también a los que presentamos conductas saludables.

Así, el problema ha alcanzado proporciones de crisis. La situación debería desencadenar una emergencia sanitaria internacional. Las personas deben involucrarse para erradicar las enfermedades como se ha hecho en el pasado.

Sin embargo, esta crisis es diferente. No puede ser combatida por la mejora de la higiene u otros hábitos saludables. Esto no es solo un problema médico sino también un problema moral.
La gente no quiere enfrentarse a esta realidad. No quieren enfrentar las verdaderas causas de las enfermedades de transmisión sexual, que son la moral y el comportamiento promiscuo. Una cultura hipersexualizada llena de pornografía asegura que todos abusen de sus apetitos sexuales en la mayor medida posible.

En lugar de tomar medidas para detener los comportamientos que están causando esta guerra, se está agregando combustible al fuego. Las autoridades están pidiendo más anticoncepción y aborto para asegurar que estos actos no tengan consecuencias natales.