ROGULLO
Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, la palabra Orgullo significa un sentimiento de satisfacción por los logros, capacidades o méritos propios o por algo en lo que una persona se siente concernida. El orgullo, cuando está controlado y se suministra en pequeñas dosis, está relacionado con el amor propio y la autoestima.
Sin embargo, la RAE también tiene la acepción de arrogancia, vanidad, exceso de estimación propia, que suele conllevar sentimiento de superioridad. Es decir, cuando la autoestima sobrepasa la modestia y la humildad, se convierte en el pecado capital de la soberbia (del latín superbia) u orgullo (del francés orgueil).
Pues bien, decía San Pablo a los Filipenses 3, 17-19:
"17 Hermanos, sed imitadores de mí y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis en nosotros,18 porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo.19 El fin de ellos será la perdición. Su dios es el vientre, su gloria es aquello que debería avergonzarlos, y sólo piensan en lo terrenal. "
¿Cómo se denomina a una persona que está orgullosa de sus vergüenzas y no de sus dones o éxitos? Es decir cuando la perversión de su escala de valores le lleva a estar satisfecho por aquello de lo que precisamente debería avergonzarse.
Es necesario inventar una nueva palabra para definir a los "orgullosos de sus vergüenzas" como decía S. Pablo. Es decir, a aquellos que no sólo han invertido su escala de valores, sino que proponen el mal como bien (vergüenzas por virtudes) y, por lo tanto, se muestran ufanos por los nuevos valores perversos.
Propongo y usaré a partir de ahora y animo a todos aquellos que así lo deseen, a que a partir de ahora, usemos el hallazgo lingüístico "ROGULLOSO" para definir a todos los que se sientan "orgullosos de sus vergüenzas" y definir al acto como "ROGULLO".
El Rogullo es mucho peor que el Orgullo porque al pecado de soberbia (orgullo) se le añade la exaltación como virtud del vicio que enorgullece. Porque en el fondo, el miedo a la libertad, crea el orgullo de ser esclavo.
Así se podría renombrar el día del "ROGULLO GAY", el "ROGULLO ETARRA", el "ROGULLO abortista", el "ROGULLO zurdo", y muchos más que irán surgiendo.
Pues bien, decía San Pablo a los Filipenses 3, 17-19:
"17 Hermanos, sed imitadores de mí y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis en nosotros,18 porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo.19 El fin de ellos será la perdición. Su dios es el vientre, su gloria es aquello que debería avergonzarlos, y sólo piensan en lo terrenal. "
¿Cómo se denomina a una persona que está orgullosa de sus vergüenzas y no de sus dones o éxitos? Es decir cuando la perversión de su escala de valores le lleva a estar satisfecho por aquello de lo que precisamente debería avergonzarse.
Es necesario inventar una nueva palabra para definir a los "orgullosos de sus vergüenzas" como decía S. Pablo. Es decir, a aquellos que no sólo han invertido su escala de valores, sino que proponen el mal como bien (vergüenzas por virtudes) y, por lo tanto, se muestran ufanos por los nuevos valores perversos.
Propongo y usaré a partir de ahora y animo a todos aquellos que así lo deseen, a que a partir de ahora, usemos el hallazgo lingüístico "ROGULLOSO" para definir a todos los que se sientan "orgullosos de sus vergüenzas" y definir al acto como "ROGULLO".
El Rogullo es mucho peor que el Orgullo porque al pecado de soberbia (orgullo) se le añade la exaltación como virtud del vicio que enorgullece. Porque en el fondo, el miedo a la libertad, crea el orgullo de ser esclavo.
Así se podría renombrar el día del "ROGULLO GAY", el "ROGULLO ETARRA", el "ROGULLO abortista", el "ROGULLO zurdo", y muchos más que irán surgiendo.
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