Sharia hembrista


Según la aleya 282 de la azora (sura) 2, se requieren –para dar por probada una deuda- los testimonios de un par de hombres, o de un hombre y dos mujeres, por si acaso una de las dos mujeres se olvida de algún detalle, la otra podrá recordárselo.

“Llamad, para que sirvan de testigos, a dos de vuestros hombres; si no los hay, elegid a un hombre y a dos mujeres de entre quienes os plazcan como testigos, de tal modo que si una yerra, la otra subsane su error.” (2:282)

Esta aleya se ha extrapolado interesadamente a otros ámbitos, de forma que, en algunos paises islámicos, esta regla no sólo se emplea en cuestiones económicas sino en otros órdenes de la vida diaria.

La ideología de género está creando también una sharia particular y totalitaria que se salta el ordenamiento jurídico constitucional de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley al haber vulnerado el artículo 14 de la Constitución española.

Recientemente una pareja se encontraba en la puerta de una discoteca en Zaragoza cuando comenzaron a discutir a gritos sobre la hora de regresar a su domicilio. En un momento dado, la mujer le dio un puñetazo al hombre en la cara, él respondió propinándole un tortazo con la mano abierta y finalmente ella le dio una patada. Ninguno de los dos denunció al otro. El varón no agredió a la mujer hasta que no recibió un puñetazo de ella y no respondió a la patada que ella le propinó.
El juez de la la Audiencia de Zaragoza que juzgó el caso, les absolvió a ambos, pero la Sala de lo Penal del TS ha revocado el fallo y ha condenado al hombre a seis meses de prisión por un delito de violencia de género y a la mujer, a tres meses de cárcel por un delito de agresión sin lesiones.

El macho, por el mero hecho de serlo, tiene menos derechos que la hembra. Bienvenidos al nuevo ordenamiento constitucional. Es la nueva Sharia hembrista, en la que la neoligión del estado confesional laicista tiene su correspondiente proyección sobre las leyes (Sharia) con las que nos regimos y en las que nos reflejamos y expresamos nuestra particular forma de ser y estar en el mundo.

Imitando la confesionalidad manifiesta del Islam, desaparece la separación iglesia laicista y estado, generándose un todo uniforme que se realimenta entre si. Es la Sharia hembrista. Así, cualquier mujer que considere que la actitud de un hombre está en contra de sus propios intereses, puede ser denunciado e inmediatamente, tratado por la justicia como maltratador y sometido a la causa de Violencia de Género.

Esta concepción misándrica de la ley anima al hombre, por precaución, a guardar cada vez más distancias prudencialmente mayores respecto de la mujer y evitar así malentendidos que pongan al macho en grave riesgo de ser denunciado.

Las consecuencias de esta forma de pensar son enormes
  1. Acaba con el galanteo y cualquier iniciativa que antiguamente solía recaer en el macho en el juego del cortejo.
  2. Se pasa el rol a las hembras, con las cuales hay que ser exquisito para evitar que el rechazo se convierta en despecho y castigue judicialmente al macho privándole de su libertad.
  3. Judicializa relaciones que las necesitan causando una alteración en la convivencia natural entre sexos.
  4. Genera de forma artificial una batalla entre sexos en la que los dos salen perdiendo respecto de la situación anterior.
  5. Cambia la visión entre sexos dado que el hombre, verá a la mujer, no como una compañera, amiga, madre o esposa sino como a una mantis religiosa hembra y enemiga a la que necesita pero de la que recela que en cualquier momento pueda cortarle la cabeza.
Pero no os preocupéis: todo pecado lleva en si msmo su penitencia. Si alguna vez te ves envuelto en un tema judicial de género, di que eres una mujer atrapada en un cuerpo de hombre y toda la parafernalia se deshace. Tabarniza la ideología de género.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Hagamos las cosas con sentido

PP2025=PSOE2005

La foto que tenía que haber sido